Poker de orejas para Paco Ureña en Bilbao, en la víspera de "volver" a ruedos murcianos como máxima figura del toreo

Cuatro orejas, cuatro, ha conseguido Paco Ureña esta tarde en la Feria de Bilbao de un magnífico lote de Jandilla y Vegahermosa al que ha entendido a la perfección.

No es fácil cortar una oreja en Bilbao, dos es bastante difícil, tres ni digamos y cuatro, conociendo al presidente Matías, es algo bastante improbable que se produzca en una misma tarde.

Es cierto que Matías venía de cometer tropelías estos días atrás, robando literalmente orejas a las figuras y también a los futuribles, como ayer mismo sucedía con Luis David Adame a quien le birló la tercera oreja y escuchó una monumental bronca el presidente y las consiguientes críticas desde todos los ángulos.

Esa circunstancia hay que explicarla, sobre todo, después de que el lorquino cobrara dos orejas en su primero por una faena tan buena como otras que han firmado otros compañeros suyos estos días pasados en la misma feria y que se premiaron con una oreja o incluso con una fuerte ovación.

Yo me alegro que le embistan los lotes y que la vida le sonría y le devuelva con generosidad como recompensa a toda la dureza que ha vivido y al gravísimo percance que le hizo perder un ojo el año pasado en la feria de Albacete. Repito, me alegro de todo lo bueno que le pase al lorquino y ojalá la suerte le siga sonriendo.

Ha dado una tarde importantísima, se ha tirado a matar por derecho, la espada le ha viajado letal, ha intervenido en quites, y ha mostrado su verdad a veces tan desgarradora cuando se hunde literalmente sobre las zapatillas y se enrosca los toros a la cintura como si fueran una bata de cola. Y en consecuencia el público se ha volcado y ha desatado su pasión tu su fervor por el lorquino. Miren el vídeo que acompaño de la salida a hombros que es sencillamente brutal.

Tremendo momento de Ureña, que este este año ha reventado dos puertas gigantescas del toreo como son las de Las Ventas y la de Vista Alegre.

Ojalá Dios y la suerte le permitan disfrutar del toreo desde donde se merece. Desde lo más alto.

Y mañana Cieza, donde Paco va a pisar por primera vez el ruedo de una plaza de la Región de Murcia después de lo del ojo, y después de haberse consagrado en máxima figura del toreo. Merece una ovación rotunda nada más termine el paseíllo. ¡Prometo ponerme en pie para tocarle las palmas!