La alcaldesa de Gijón pretende aprovechar que dos de los toros estoqueados el pasado domingo en el coso del Bibio, se llamaban "Feminista" y "Nigeriano", para aludir a no sé qué atentado contra dos colectivos tan vulnerables.
Perdóneme Señora alcaldesa, aquí los primeros vulnerables vulnerados somos los aficionados a la Tauromaquia. Usted quiere aprovechar vilmente la coyuntura de los nombres de los toros (a los cuales no se les bautizó la mañana de la corrida, sino que sus nombres los heredan de madres a hijos, como sucede tradicionalmente en las ganaderías de bravo).
Si Usted, Señora alcaldesa de Gijón, propone abolir la Tauromaquia en su municipio y está poniendo en evidencia que desconoce cual es el límite de sus atribuciones como tal, dado que no tiene competencias para ello.
Y al mismo tiempo, Señora alcaldesa de Gijón, está incumpliendo el deber que nos ampara a los taurinos por la Ley 18/2013, de 12 de noviembre, que Usted ni conoce, ni práctica, ni respeta, entrando en una peligrosa ilegalidad que bien podría hacerle perder el puesto, Señora alcaldesa de Gijón, antes de la próxima Feria de Begoña. Tiempo al tiempo.
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